El acumulador de orgón (también llamado ORAC de ORgon ACcumulator) es una cámara cuyas paredes están hechas con la siguiente estratificación desde el interior hacia el exterior:

1. lámina de hierro

2. material orgánico (después indicada con MO) como lana, celulosa, fibra de madera y otros materiales que absorben la energía orgón

3. lana de acero (después indicada con LA)

4. MO

5. LA

6. paneles de cierre hacia el exterior (mejor hecho con un material orgánico que deje absorber el orgón).

De esta manera tendremos 3 capas de material orgánico y 3 capas de material metálico, es decir, 3 capas dobles acumulantes. Esta estratificación produce una irradiación de orgón hacia el interior del acumulador.

James DeMeo en su "Manual del acumulador de orgón" - Natural Energy Works aconseja no usar cobre y aluminio para las capas de metal y poliuretano para las capas absorbentes, ya que pueden desencadenar reacciones intoxicantes en los usuarios del aparato.

La web está llena de páginas relacionadas con dispositivos "orgónicos" que han tomado las formas y características más diversas. Muchos sitios afirman, hablando de los productos que comercializan, también la capacidad de limpiar el aire de los diversos tipos de contaminación. Mucha gente siguiendo estos sitios y no conociendo directamente el trabajo de Reich y de los médicos post Reichianos que se han aventurado con el uso del ORAC y la herramienta original, y en consecuencia no conociendo las propiedades y leyes de la energía orgónica, han emprendido la construcción de estos dispositivos a menudo usándolos de manera imprudente y sin evaluar los beneficios reales o el posible daño al entorno en el que viven.

El ORAC es un dispositivo que es muy sensible al entorno. En particular, es sensible a diversas fuentes de contaminación, como equipos que generan campos electromagnéticos, rayos infrarrojos, rayos X o radiación nuclear. Nuestros hogares y lugares de trabajo ahora están llenos de estos dispositivos (es suficiente pensar a los aparatos wi-fi o luces fluorescentes o detectores de humo que contienen sustancias con cierta radioactividad) por lo que si no tiene espacio sin estos dispositivos dónde colocar un acumulador de orgón, es importante prestar atención a cualquier efecto no deseado durante el tratamiento.

Esto se debe a que, como Reich ya observó en su tiempo, la energía orgónica, especialmente si se acumula, en contacto con contaminantes como los que acabo de mencionar, desata lo que él mismo llamó el efecto ORANUR. El efecto ORANUR en las personas se percibe como una rara hiper-excitación con reacciones fuertes de malestar en el organismo. En caso de que no tiene entornos adecuados se pueden ententar de limpiar el lugar o preparar paquetes biónicas que ofrecen irradiación orgónica sin reaccionar con los contaminantes presentes en el entorno.

Pasemos a mencionar los efectos positivos observados por muchas personas generados por el acumulador de orgón en el organismo humano. En general, se dice que el acumulador de orgón recarga el organismo. Como esta palabra es bastante reductiva y mecanicista, me gustaría explicar en detalle qué significa.

El acumulador de orgón y, más concretamente, una fuerte carga de orgón, normalmente proporciona al organismo:

• Un soporte para la pulsación de energía tanto a nivel celular como a nivel de todo el organismo mediante un efecto de recarga de la sangre y otros fluidos corporales, estos últimos son los que primero y más fácilmente absorben la energía orgónica.

• Sentimientos de agradable calidez o frescura.

• Un aumento en la temperatura corporal acompañado de enrojecimiento.

• Mayor peristalsis y una respiración más profunda.

• Aumento del crecimiento y reparación de los tejidos de cualquier tipo que favorecen la pulsación y, por lo tanto, la salud de las células individuales.

• Refuerzo de las defensas del cuerpo, alcalinización y aumento en el nivel de energía general.

• Favorece las trasmutaciones biológicas

• Hormigueo en la piel

• Moderación de la presión arterial y latidos cardíacos

• Efecto expansivo vagotónico en todo el organismo

 

Estos últimos puntos estan escritos en rojo, ya que debe recordarse que la coraza (ver parrafo) impide que el cuerpo beneficie plenamente de las ventajas de la irradiación de energía orgónica. En particular, los bloqueos de la coraza crean una cierta rigidez muscular acompañada de hipercarga en ciertos segmentos del cuerpo. Esta hipercarga junto con la rigidez muscular de la coraza choca con un aumento de la pulsación y de la carga de energía. Esto significa que ciertos efectos positivos en el cuerpo (especialmente aquellos en rojo) pueden convertirse en sentimientos de ansiedad, temblores, hormigueo no deseado, percepción inmediata de calor molesto, náuseas o dolor de cabeza, aumento excesivo de la presión arterial y palpitaciones cardiacas. 

Todo esto no quiere decir que tenemos que renunciar a los efectos beneficiosos sobre el organismo, pero que el acumulador de orgón se debe utilizar con mayor cautela y que un trabajo más profundo y una psicoterapia caracteroanalítica corporal (que sirve precisamente para el reblandecimiento y la eliminación de la rigidez de la coraza) sería recomendado.

La irradiación orgónica sigue siendo según varios médicos, uno de los descubrimientos más importantes, si no el más importante, en la historia de la medicina occidental moderna y el instrumento más efectivo para abordar ciertas situaciones. El dr. Kavouras en su libro "Heilen mit Orgonenergie" describe lo que él cree sería una grave omisión médica el hecho de no utilizar la radiación de orgón para el tratamiento de quemaduras, ya que ayuda de manera sorprendente la regeneración celular, la reconstrucción de los tejidos, la sanación de la infección de la herida y la curación de la misma sin los problemas habituales conocidos en la práctica médica clásica.

 

Las personas que sufren un debilitamiento sistémico (que suele ser la base de enfermedades degenerativas como el cáncer) generalmente se benefician inmediata y continuamente del uso del acumulador de orgón para su irradiación de energía sistémica. Sin embargo, una evaluación global de la persona desde el punto de vista energético, su historia, su respiración y la tensión muscular, su manera de enfocar la vida y las relaciones con los demás es esencial con el fin de beneficiar el acumulador de orgón o de otros dispositivos que irradian energía orgónica. Si la presencia de bloqueos e hipercarga en ciertas áreas impide el tratamiento sistémico, se puede recurrir a tratamientos localizados utilizando mantas, cojines, cinturones o proyectores de orgón.

Las mantas, cojines y cinturones de orgón tienen la clásica estratificación acumulante de material orgánico y lana de acero. Sin embargo, la parte interna que entra en contacto con el cuerpo está cubierta con un tejido ligero. De esta forma, la irradiación de orgón se puede limitar a ciertas áreas del cuerpo limitando los efectos indeseables debido a la hipercarga en otras áreas del cuerpo. Este puede ser el caso de heridas, quemaduras, fracturas, consumo de ligamentos o huesos en áreas particulares del cuerpo cuya curación puede acelerarse y mejorarse mediante la irradiación de orgón.

El proyector orgónico es un pequeño acumulador de orgón con 10-20 estratificaciones dobles y equipado con un tubo de metal en cuya extremidad se coloca un embudo también de metal, los dos cubiertos externamente son con material aislante y sirve para irradiar localmente.

En este artículo no profundizaré más ya que el objetivo era ofrecer una presentación general. Una profundización de los tratamientos con irradiación de orgón en diferentes patologías, para estados fisiológicos particulares como el embarazo o el ciclo menstrual o como herramienta de primeros auxilios, por ejemplo en caso de quemaduras, heriLa cama orgánicadas, fracturas, etc. se encuentra el siguiente enlace: